—Tras impactar en el WBC, el outfielder cubano-mexicano de los Rays, Randy Arozarena, espera elevar su nivel de juego en esta temporada.
Antes de que Giancarlo Stanton enviara a 485 pies del plato una slider de Ross Stripling este domingo en Yankees Stadium, Randy Arozarena encabezaba el Top-5 de bolas bateadas a más larga distancia según el ranking en tiempo real provisto por StatCast.
En cuenta de 1-0, con un out y bases limpias durante el final de la cuarta entrada, Randy aplastó una bola rápida de 93.7 mph del zurdo de Detroit, Joey Wentz, ofreciendo ventaja de 1-0 a los Rays. El bambinazo solitario de Randy, como de costumbre, reavivó la pasión de la fanaticada en Tropicana Field. Pero, más allá de otro emocionante bat flip protagonizado por el flow ofensivo de Randy, la conexión desató un número que prácticamente pasó desapercibido: recorrió 436 pies entre left y center, registrando su segundo jonrón más largo en Tropicana Field.
El promedio de distancia de los 20 jonrones de Randy fue de 398.9 pies durante la pasada campaña, con 11 de ellos devorando bolas rápidas. Sin embargo, el impacto más significativo no era precisamente la distancia recorrida de la conexión. Para Arozarena, fue apenas el segundo jonrón contra una bola rápida en 47 veces al bate definidas al golpear la pelota en ese punto vertical bajo, ligeramente fuera de la zona de strike:
La zona ideal de Randy Arozarena para conectar jonrones en MLB ha sido ese punto bajo vertical donde acumula 11.1 HR% (117-13) y promedio de bateo de .371. Su agresiva aceleración en el swing ha sido parte del talento como bateador que lo ha impulsado a tener éxito en el plato, pero este año Randy está trabajando para eliminar errores y realizar ajustes con mayor efectividad. Desde que encabezó el lineup de México en el pasado Clásico Mundial de Béisbol, se notaron parte de los cambios de Randy, básicamente en la postura de sus manos y la colocación del bate.
Comparación en la postura
Comparación en la preparación del swing
A diferencia de años anteriores, ahora coloca sus manos más abajo y el bate está quedando en una posición vertical, ajuste que podría ayudar al golpeo más fluido de los pitcheos internos y dentro de la zona de strike. En las anteriores ilustraciones podemos apreciar la nueva proyección en busca de un mejor ángulo de lanzamiento. Obviamente, la disciplina en el plato será el primer paso a prueba en el enfoque renovado de Randy.
De la selección de los pitcheos y los conteos favorables que pueda obtener también dependerá el resultado. “Solo quiero estar un poco más presente durante el tiempo del juego, ser un poco más inteligente durante las situaciones del juego”, dijo Arozarena al reportero de MLB, Joe Trezza, a través del intérprete del equipo, Manny Navarro. “Obviamente, quiero mejorar mis números del año pasado. Pero justo al comienzo del juego, quiero estar un poco más preparado”. En la pasada temporada, Randy probó el éxito de varios ajustes luego de convertirse en el primer jugador de los Rays con al menos 20 jonrones, 30 bases robadas y 40 dobles.
Su naturalidad y tendencias operativas como bateador agresivo no cambiaron. Si se trata de selección de pitcheos, las tasas de swings a lanzamientos fuera de la zona de strike resultaron exorbitantes: aumentó 6.1% en comparación con los registros de 2021. Aun así, hay par de índices que demostraron un crecimiento alternativo de Arozarena al reducir sus ponches en un 3.9%. Ese resultado se correlaciona con la disminución del 3.8% en sus swings sin contacto, lo cual explica cómo Randy fue más efectivo incluso a pesar de perseguir pitcheos fuera de la zona de strike con mayor frecuencia.
“Está muy motivado para continuar encontrando esa consistencia durante todo el año”, dijo el manager de los Rays, Kevin Cash. “Irá por un mes y es el mejor jugador de béisbol, y luego tal vez se tranquilice un poco. Pero para ser justos con Randy, al final del año, miras hacia arriba y está reuniendo algunas estadísticas bastante especiales. Estaríamos encantados si lo vuelve a hacer. Y si continúa mejorando, también está bien”.
Por supuesto, aún no sabemos si todos los ajustes que está poniendo en marcha superarán las expectativas del propio Randy Arozarena, pero su deseo de elevar el nivel de juego es admirable.
“En las últimas dos temporadas, he podido aprender de algunos de los errores que he cometido”, señaló Arozarena, “y eso es algo en lo que quiero centrarme esta temporada”.
(Foto: Randy Arozarena/GettyImages)
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